¿Qué es Bee de Fleur?

 

Como emprendedores con un amor especial por la naturaleza, hemos desarrollado "Bee de Fleur", un proyecto con el propósito de proteger a las abejas, ya que estas juegan un papel crucial en la polinización de cultivos y el apoyo a los ecosistemas. Sin abejas, muchos de los alimentos de los que dependemos desaparecerían. Sin embargo, en los últimos años, las poblaciones de abejas han disminuido debido a factores como la pérdida de hábitat, el uso de pesticidas y el cambio climático. Esto ha generado preocupaciones sobre el futuro de los alimentos y la sostenibilidad de nuestro planeta.

Al crear una marca que produce productos de lavanda y al mismo tiempo protege a las abejas, podemos abordar dos problemas importantes a la vez:

  • En primer lugar, apoyamos a las poblaciones de abejas brindándoles un hábitat y una fuente de alimento.
  • En segundo lugar, estamos produciendo productos que son a la vez útiles para las personas y respetuosos con el medio ambiente.

La lavanda, es una planta que no solo es bonita sino que también tiene muchas propiedades beneficiosas. Es conocida por su aroma calmante, que puede promover la relajación y reducir el estrés. 

Además, nuestra marca funciona con un modelo de negocio sostenible que promueve el uso responsable de los recursos, y ayuda a generar empleo en zonas rurales carcaterizadas por un alto nivel de despoblación. Al cultivar nuestra lavanda en la provincia de Guadalajara (España), impulsamos la economía loca, y al mismo tiempo reducimos el impacto ambiental al tratarse de productos de proximidad.

En resumen, nuestra marca se dedica a proteger a las abejas, y producir productos de lavanda porque creemos que estos objetivos son importantes para la salud de nuestro planeta y de nuestra gente. Al respaldar este proyecto, las personas pueden disfrutar de productos de alta calidad y, al mismo tiempo, contribuir a un futuro más sostenible.

Bee de Fleur está localizado en Medranda (Guadalajara) dentro de la red Natura 2000, dedicada al cultivo respetuoso con el medio ambiente.

Para ello hemos desarrollado una metodología de cultivo basada en una solución tradicional de cultivo de lavandas, con el fin  maximizar la calidad de las plantas, evitando la exposición a pesticidas y fertilizantes químicos que permanecen en la flor durante su desarrollo.

Actualmente el proyecto cuenta con una plantación de 2 hectáreas de Lavandín tipo “Super” (Lavandula hybrida clone super), con la que producimos nuestra propia gama de productos; aceites esenciales de lavanda, agua de lavanda y ambientadores de flor seca, que distribuimos de manera local a consumidores que comparten la visión y misión de nuestra forma de entender como funciona la naturaleza.